diumenge, 9 de gener del 2011

La Tristeza y la Furia de Jorge Bucay


En un reino encantado donde los hombres nunca pueden llegar, o quizá donde los hombres transitan eternamente sin darse cuenta…

Había una vez…

Un estanque maravilloso. Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente…

Hasta aquel estanque mágico y transparente se acercaron la tristeza y la furia para bañarse en mutua compañía. Las dos se quitaron sus vestidos y, desnudas, entraron en el estanque. La furia, que tenía prisa (como siempre le ocurre a la furia) sin saber porqué, se bañó rápidamente y, más rápidamente aún,salió del agua…

Pero la furia es ciega o, por lo menos, no distingue claramente la realidad. Así que, desnuda y apurada, se puso, al salir, el primer vestido que encontró.
Y sucedió que aquel vestido no era el suyo, sino el de la tristeza…

Y así, vestida de tristeza, la furia se fue. Muy calmada, muy serena, la tristeza terminó su baño y, sin ninguna prisa, con pereza y lentamente, salió del estanque. En la orilla se dio cuenta de que su ropa ya no estaba. Como todos sabemos, si hay algo que a la tristeza no le gusta es quedar al desnudo. Así que se puso la única ropa que había junto al estanque: el vestido de la furia.

Cuentan que, desde entonces, muchas veces uno se encuentra con la furia, ciega, cruel, terrible y enfadada. Pero si nos damos tiempo para mirar bien, nos damos cuenta de que esta furia que vemos es sólo un disfraz, y que detrás del disfraz de la furia, en realidad, está escondida la tristeza.

© Jorge Bucay

3 comentaris:

  1. Posiblemente toda furia tenga efectivamente detrás un gran poso de tristeza, pero también de frustración, de deseos insatisfechos, de ansias de dominación o de salirse con "la suya", de discriminación, de racismo...
    Gracias por invitarme a este blog tuyo, la imagen debería enseñarnos ¿verdad?.
    Bicos

    ResponElimina
  2. Hola Manel:

    Es magnific aquest relat i tendre la fotografía.

    Ben cert que devagades sote la furia del lleó, s´amaga una personalitat fluixa o trista.

    En Jorge Bucay es estupendo.
    Jo tinc el llibre Déjame que te Cuente.

    Gracias per publicar aquest relat d´ell.

    Una abraçada, Montserrat

    ResponElimina
  3. Genial, Manel.
    Gracias por enviarme el enlace.

    Besos!!!

    ResponElimina