Namasté
Que el camino venga a tu encuentro,
que el viento sople siempre a tu espalda,
que el sol te de siempre en tu cara,
que la lluvia caiga lentamente en tu campo y hasta,
que volvamos a vernos... Que Dios te tenga en la palma de su mano.
Enviado por Marta Cerro (noviembre 2012)